sábado, 22 de enero de 2011

"BLANCO NOCTURNO", de Ricardo Piglia.

Hace unas semanas terminamos de leer “Blanco nocturno” del gran escritor argentino Ricardo Piglia. Nos tomamos unos días de reposo para poder distanciarnos de la obrar y poder dar una recomendación acorde a lo prefijado, y socialmente aceptado, por nuestros recurrentes, y frecuentes, lectores.

“Blanco nocturno” es sin dudas una novela para este enero y posiblemente podamos extender su lectura hasta febrero.

Obviamente que el libro se devora a si mismo. No hace falta aclarar que la prosa de Piglia es altamente adictiva debido a distintos factores, como la excelencia, el buen gusto en la elección de palabras, las historias, la complejidad, los detalles. Es una colage complejo y a la vez seductor. Pero sin dudas el subrayado de lo mejor que tiene la novela se lo llevan los personajes y el micromundo que se crea en un pueblito de la provincia de Buenos Aires.

La cosa comienza con un asesinato y la búsqueda de un culpable. Para esto el autor se agarra de las historias que suelen pasar en los grandes infiernos que suelen ser estos pequeños poblados. Y aquí comienza un desfile de personajes que luego serán los encargados de guiarnos hacia la resolución de la historia.

Ahora bien, si creen que esto es el típico policial detectivesco, se equivocan. Porque luego del asesinato, la historia cambia su rumbo y lo que imaginamos sería el punto de desarrollo, pasa a ser un disparador para que se abra la olla de las vanidades pueblerinas.

Las postales que con frecuencia Piglia describe son el condimento ideal para enmarcar los sucesos; y quien haya conocido uno de estos pueblitos, o siquiera haya pasado por uno, sabrá de lo que hablo. Los fundadores del pueblo, los pobres, el comisario, su ayudante, el bar, el club social, el Hotel, el homosexual, algunos gauchos, chacareros, las bellas hermanas, el extranjero y finalmente el periodista que viene de la capital, son los encargados de contarnos las amenazas, las envidias, las traiciones, los engaños, el amor correspondido, el que no tanto, la locura, las desdichas, la pasión, la valentía y el heroísmo, a través de pluma de Ricardo Piglia.

Sin dudas una novela para pasar el verano, muy recomendable.

Por Misil Soviético.

miércoles, 19 de enero de 2011

ERAMOS TAN PUNK´S?

Hablamos de ponerle actitud a la cosa. No importa el cómo sino los porqués. Un merecido reflejo de una variopinta clase que fue mutando a través de las décadas, pero que a pesar de ello nunca dejó de estar en los oídos, en la ropa y en los peinados de generación y generación de adolescentes “sin futuro”. Qué pasa ahora? O mejo “Ahora que pasa eh?” resulta que terminamos la escuela, culminamos la academia, leemos sociología, política, nos interesamos por el mundo, la economía, el discurso y las influencias mediáticas, nos casamos, accedemos a un crédito, entramos definitivamente en el sistema que queríamos escupir desde dentro, guardamos la guitarra, desenchufamos el equipo, usamos la remera negra para que duerma el gato y nos dejamos crecer la panza? NO, todavía creemos en la liberación racional e irracional del sujeto como individuo atado, subyugado y disminuido por una sociedad parapléjica que busca incansablemente el control determinista de cada uno de sus miembros. Y así despacito, despacito se alcanza la aniquilación progresiva de la “Verdadera vida”.

En 1957, Guy Debord, poeta experimental y antiguo miembro del movimiento Letrista afirma que: según los situacionistas, la explotación capitalista del hombre por el hombre ha derivado hacia la creación de un nexo social entre los individuos basado en las imágenes; imágenes controladas por el poder que ha instaurado un nuevo modelo existencial.
Por eso si te vas a dejar controlar por los íconos sociales creados por los medios, mientras te dejas arrebatar los derechos de elección, subjetividad y comportamiento, quemate definitivamente la cabeza y no le dejes carroña a los buitres del dominio hegemónico.

Es así como de este movimiento se desprendes más de un trastorno en los valores estéticos socialmente aceptados y violentamente rebeldes. Contradictorio en todas sus manifestaciones, el PUNK, escupe grita e insulta a sus “ídolos”, porque no los tiene. Se manifiesta, escribe y canta porque no son músicos. Habla seriamente y se rie de sí mismo, porque es el bufón de la corte que escupe la verdad detrás de ese personaje de pelos parados.

Y como no queremos perder esa teoría, y muchos menos esa práctica, detallamos a continuación una serie de ejemplificaciones que nos hacen seguir creyendo que en realidad seguimos siendo unos perros inútiles, sin un destino, ni futuro, abocados a la autodestrucción mientras nos reímos de un mundo equivocado…

Malcolm McLaren:
El punk sigue existiendo, se ha infiltrado subrepticiamente en muchos terrenos. [...] A mi modo de ver, en donde menos ha influido es precisamente en la música.
[...] De todas las personas que participaron realmente en la génesis del movimiento punk, de todos los que sabíamos lo que estábamos haciendo y teníamos una noción clara de la clase de subversión que fraguábamos, no recuerdo a nadie que fuera músico.
[...] Para nosotros fue un simple medio de transporte de unas ideas que trascendían la anécdota de las bandas concretas. [...] Los Sex Pistols fueron un instrumento, una herramienta, y eso es algo que tal vez ellos no llegaron a comprender jamás.» (Mac Laren, 1995:44).


Por Misil Soviético luego de leer: “Punk y arte de vanguardia. La carnavalización estética como acto de subversión.”
Juan Carlos Fernández Serrato

sábado, 15 de enero de 2011

Volver al futuro. Grandes recuerdos.



Es posible que sea una de las boludeces más grandes de la vida. -¿Ir a ver una película que ya la viste incansables cantidad de veces por la tele y que inclusive la tenés en dvd?- Sí, es una boludéz. Pero también es la mejor y más grande de las boludeces que he hecho en mi vida.

Y en ese momento entendí varias cosas…

Posiblemente es el film que más influenció a una generación (visto el cine repleto de sujetos de ambos sexos, que promediaban desde los 25 a los 35 años, así lo deduje) y uno no logra olvidárselo con facilidad.

Ver “Volver al futuro”, después de aproximadamente dos décadas, me hizo comprender las marcas que puede dejar el cine en un pibe de 9 años. Porque estoy seguro que esto que escribo se repitió infinidad de veces en las cabezas y en las casas de miles de pendejos.

Claro, obviamente que quería una patineta, (skate) no para andar por la cuadra, sino para agarrarme de la parte de atrás de los autos para ir a mil, frenar, y hacer chispitas. Ejercicio que fue prudentemente censurado por advertencias paternas del estilo: -Vas terminar con todos los huesos rotos y no te pienso llevar al hospital-

Salir corriendo a pedir mi primer par de zapatillas, porque hasta ese momento las elegía mi viaja: -Mamá, quiero unas All Star negras!!!- zapatillas que más adelante se tatuaron a mis pies, en inmediata relación al look Ramones. Porque quien no tuvo unas All Star negras???

Porque en ese momento enamorar a una dama era una tarea y una actividad que escapaba a las posibilidades de cualquiera, pero claro, Marty dabas las claves: o te cagabas a trompadas con alguno o te ponías a tocar la guitarra.

Mis capacidades pugilísticas eran nulas y escasas, por lo tanto elegí la segunda de las opciones. Y claro, ver volar a una persona después de conectar un amplificador, fue la clave fundamental para que el Rock entrara a mi vida por la puerta grande: -Loco, tocar la guitarra con ese sonido debe ser lo más. Un acorde, sólo un acorde y se rompe todo- seguramente así llegó mi primer guitarra eléctrica, las púas y un amplificador que acoplaba a la mitad de su volumen.

Después el enamoramiento… una pentatónica en La, una arrastradita de un semitóno y el mundo entero a tus pies. Lo aprendí de tanto ver la peli. Y esa guitarra, qué viola es? Si señor ahí estaba… es una Gibson… una Gibson ES335, cruda, poderosa. Quiero revolear el brazo así, como un ventilador, quiero saltar y tirar el amplificador, quiero estirar las cuerdas hasta que el agudo sonido haga reventar los tímpanos de todos. (Más tarde determiné mi amor incondicional por una prima hermana de la ES335, es decir la Les Paul… pero esa es otra historia)

En fin, volver al pasado con “Volver al Futuro” me hizo saber un poco quién era y de dónde venía. Me hizo creer que las cosas no pasan por casualidad, sino que todo forma parte de un destino que armamos nosotros mismos, con influencias que nos llegan de todas partes y que al recordarlas nos hace revivirlas. Forman parte de huellas imborrables que escribimos durante la vida gracias al “poder del amor”, y que vamos dejando en el camino para recogerlas al volver…. “–Caminos? Donde vamos no necesitamos… caminos.”






Por Misil Soviético

lunes, 10 de enero de 2011

"ZOMBIS NAZIS" de Tommy Wirkola.


Nada como una buena cantidad de paisajes nevados, para aplacar las calurosas noches de enero. Todo acompañado de un sin fin de litros de sangre y kilos de tripas.

Sinceramente puede parecer una estupidez, una de esas tantas películas que se hacen con dos mangos y que luego salen en TV. para ocupar un lugar intrascendente en la grilla de programación. Efectivamente esto es así… pero que bien viene para un sábado a la noche ver una zombis!!!

Y es justamente con “Zombis Nazis” de Tommy Wirkola que se logrará el deleite de una cantidad injustificada de muertos vivientes, los cuales están encargados de aquejar la parcimonia y las buenas costumbres de un grupo de adolescentes, que lo único que querían era pasar un fin de semana de sexo, droga y rock and roll.

Si bien esta película cumple con todos los requisitos que vimos y recontravimos desde Romero y Sam Raimi hasta “Walking dead”, en cuanto al género, su origen de procedencia le da el toque distintivo. Sí, noruegos filmando películas de zombis!!! Sólo por ese gentilicio el film merece una oportunidad.

La trama?!… bueno, un delirio sin pies ni cabeza. Un batallón de nazis de la Segunda Guerra jura proteger una cofre de oro (el tan conocido oro nazi) enterrado en una montaña nevada. Luego de 70 años un grupo de jóvenes visita esa misma montaña para vacacionar alegremente. ¿Qué pasa? Encuentran el oro, que hace despertar a los muertos con uniformes y todo. De ahí en adelante, corridas, gritos desapariciones, desmembramientos, autopsias vivas, mordiscos, decapitaciones, intestinos, intestinos, intestinos y una lucha encarnizada entre zombis nazis y dos jóvenes armados con una hoz y un martillo (GENIAL). Todo, todo muy bien filmado y en un discurso entre lo cómico, lo sarcástico y el tributo (Tarantinezco? Rodriguezco?) a este tipo de films.

SUJERENCIA:

Disfrútese “Zombis Nazis” con una buena remeras de “The Ramones”. Una grande de muzarella (bien grasosa, a la piedra, bien caliente). Algunas cervezas en la heladera y un Tequila para sobrecargar el ambiente.

Ahora sí, que se vengan los muertos vivos!!!





Por misil Soviético

sábado, 8 de enero de 2011

CACHETAZO A LA GAMBETA.


Lo que pase de acá adelante ya no va a ser lo mismo. El fútbol a veces es tan jodido que de un día para el otro te deja tirado con una sensación de vacío insufrible, con unas terribles ganas de volver el tiempo atrás, a los minutos de expectativas, a la ansiedad insostenible. A veces me pregunto cuando vendrá esa revancha que tanto nos promete el tiempo.

¡Que tristeza por Dios!, nunca más poder verte con la banda en el pecho, justo vos que mientras coleccionaba fracasos, me dabas cuotas de felicidad en mi adolescencia trunca.

Nunca más la camiseta por fuera del pantalón, las medias desordenadas, porque con vos se va el potrero, ahora sólo quedan jugadorcitos de play, pero de eso ya no entiendo.

¡Que sabrán los que hablan, los títeres, los dirigentes, qué pueden entender de amor a la camiseta, si lo echan así, que pueden hablar de responsabilidades quienes toman decisiones tan irresponsable.

Justo al Burrito ¿Qué pueden entender de amor?

Merecía al menos un partido, diez partidos, mil partidos más en River. Y qué importa la edad, si con él en la cancha todo era posible. Pero no, alguien dice “no va más” y de un momento para el otro, se termina la sensación de ver lo imposible, del quiebre de cintura irreverente, de las corridas interminables y los rivales humillados, de poder tocar el cielo con las manos una vez más con la camiseta de River.

Chau Ariel, hasta siempre, que tristeza por Dios, que cachetazo a la gambeta……..

Por Barzi.

BALANCE DE CINE 2010.

Como todo en esta época del año, nosotros también queremos tener nuestro balance 2010. Por eso hacemos un recuento de todas las películas que recomendamos durante el año y ponemos en el podio a tres de las imperdibles. Esto no quiere decir que las demás no sean buenas, pero una selección sobre la elección siempre hay que hacer.


  • The boat that rocked” de Richard Curtis
  • Adventurland” dirigida por Grez Mottola
  • “The Hangover” de Todd Phillips.
  • “Into de wild” de Sean Penn
  • “Once” de John Carney
  • “It might get loud”
  • “Soul Kitchen” del director Fatih Akin.
  • “The Guitar” de Amy Redford
  • “Aurora boreal”
  • “Guardianes de la noche” y su secuela “Guardianes del día”.
  • “The last man on the earth”
  • “Mary and Max” por Adam Elliot.
  • “Mr Nobody” de Jaco van Dormael

En el podio de las favoritas están:

  • 3º lugar para: “Into de wild” de Sean Penn

En un segundo lugar y obteniendo un bronce muy merecido:

  • “It might get loud”

Suenen los tambores y redobles porque el primer puesto en esta elección totalmente arbitraria, individual, subjetiva y maniquea es para…:

  • “Mr Nobody” de Jaco van Dormael
Por Misil Soviético

martes, 4 de enero de 2011

"EL SABUESO DE LOS BASKERVILLE" de Sir Arthur Conan Doyle

Recién terminado el año y con el próximo recién nacido, el libro de este mes está desempolvado de la vieja biblioteca. Nada mejor que volver a un clásico imborrable de la retina juvenil, para olvidar la pesadumbre de las responsabilidades adultas y encausarse en aventuras que siempre nos hubiese gustado vivir.

Por eso, del fondo del primer estante y con una capa sólida de pelusa por arriba, este mes traemos la recomendación (o la vuelta a la lectura… en muchos casos) de “El sabueso de los Baskerville” también conocido como “El mastín de los Baskerville”. Un libro clásico de todo aquel que se precie de tener una buena biblioteca, que lo acompaña desde su más tierna infancia. Y una lectura casi obligatoria de aquellos que no queremos perder por nada del mundo el gusto por la intriga, el terror y las aventuras.

Es la tercer novela de esta magnífico autor quien la escribió al volver de Sudáfrica, donde trabajó de voluntario en un hospital. El argumento del libro lo escribió junto a un joven periodista llamado Bertram Fletcher Robinson quienes idearon la aventura a partir de la leyenda de Richard Cabell cuya tumba existe realmente en un pueblito conocido como Buckfastleigh.

Si querés rememorar esas noches de verano, en donde el calor no te dejaba dormir y te decidías incondicionalmente a tomar un libro de aventuras para terminarlo la noche siguiente, sin dudas el libro que necesitas es “El sabueso…” de Sir Arthur Conan Dolyle y volvé a descubrir el misterio que encierra la maldición de los Baskerville…

Por Misil Soviético

lunes, 3 de enero de 2011

PANZA, "La madre de todos los picantes".

Los días son mucho más largos y también mucho más insoportables. Por eso esta vez Nicanor nos trae para este año que comienza, prácticamente en el mismísimo infierno, un disco triple. Como para que a nadie se le ocurra decir que lo que faltan son ganas.

El trabajo es impecable y viene de la mano de PANZA.

Cada disco se disfruta con una parte distinta de la lengua, es decir que hace falta mucho paladar como para poder sobrellevar tanto y diverso sonido rockero.

Para largar nomás, podemos hacer una entrada con “Caramelo” para poner el primero de la trilogía. Dulce, suave, armónico… casi encantador. Pero la boca te queda llena de agua, por lo que la sed no afloja y te quedás con ganas de algo más. Ese justamente es un buen momento para “Pomelo”, quien es el encargado de dejar la dulzura y dedicarse a poner en funcionamiento las glándulas salivales con acido amargor.

En el instante en que toda la boca pasa a ser un gran conjunto de sabores musicales, con amplio espectro de matices y sonoridades, vine el golpe de gracia. “Ají”, picante energético, con el cual hay que tener mucho huevo para quedárselo entre los dientes sin salir gritando a pedir un vaso de agua.

Panza, tres discos, tres sabores que nos trae este mes El Bar de Nicanor.

Por El bar de Nicanor y Misil Soviético