jueves, 15 de abril de 2010

No se preocupen por mi...


Porque para mucho de nosotros no existía otra manera de pararse frente a un micrófono que no sea poniendo una pierna hacia delante (levemente flexionada) y menearse continuamente al ritmo salvaje de una guitarra distorsionada. Era así, porque al único que nos queríamos parecer era al gran cantante de Los Ramones.

Hoy hace nueve años que este flaco desgarbado, a quien nunca le conocimos los ojos, nos dejó físicamente. ¿Y qué legó con su talento innato y su versatilidad de voz? Además de discos y grandes temas inoxidables, dejó a toda una generación (reproduciéndose aún) que cuando escucha esas notas nasales salir de una garganta que como nadie supo cantar la historia del PUNK, sigue soñando con calzarse unos chupines rotos, poner una pierna sobre el parlante y gritar on, dos, tre va!!!


4 comentarios:

  1. No tuve la suerte de pararme frente a un micrófono con una banda detrás...pero seguramente de tener la posibilidad hubiera imitado esa performance tan desgarbada y llena de "punkrocker" de este personaje hermoso.
    Rest in Peace!!!

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  2. Grande Joey! Como se extrañan la hora y monedas de los recitales de los ramones, hora y pico de adrenalina!

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  3. es verdad cuando escucho un tema de los ramones , es imposible, que hoy con mis 34 años, al igual que hace 17 años atras no simule estar tocando una guitarra imaginaria, o una bateria, por eso me tatue su escudo, para cuando lo vea, vea a mis amigos, a mi abuelo, hermanas y ese barrio tan lindo en el que creci,y sobre todo suene, en mi mente un 1,2,3,4y tan,tatan,tan tataan psicoterapy, gracias

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  4. Gracias por el comentario y aguante Los Ramones!!!
    El Misil

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