El calor apremia, la sangre sigue hirviendo. Nada que calme tanto apego a las cosas (apego en el sentido pegajoso) Por eso lo mejor es motivar al paladar, desensibilizar las papilas gustativas y recobrar el gusto por las buenas cosas como el cine, la bebida y la música (poner el orden de prioridad que uno quiera)
Nada de espectáculos ni tecnología contaminante. Simplemente el mimetismo simbiótico con aquellos que más y mejor saben tomar cerveza y componer música especial para eso. Y que mejor que cerrar el triangulo con una buena película con grandes actores, que ayudan y vienen bien para la ocasión.
Por eso para esta noche: ricos pibes, música fuerte y varias cervezas en la heladera. Y si estas escuetas y humildes palabras no te motivaron escucha!!!
SALUD!
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